El pasado 21 de septiembre de 2011, fue un día histórico para el Turismo Carretera. Es que ese día, en la pista de aterrizaje de la Base Marambio, en la Antártida Argentina, descendió de un Hercules de la Fuerza Aéres Argentina un Torino de Turismo Carretera. El auto fue conducido por Hugo Mazzacane, vicepresidente de la ACTC, y por Roberto Urretavizcaya, actual piloto y miembro de CD de la ACTC y bajó en marcha desde el Hércules, gracias al trabajo de Alfredo Gardelito Fernández. La comitiva de la ACTC se completó con el gerente General de la ACTC, Fernando Miori, y todo el viaje se pudo realizar gracias a la gestión del ministerio del Interior de la Nación, quienes hicieron todas las gestiones por intermedio de Luis e Ignacio Casasola, de la secretaría privada del ministro del Interior, Dr. Florencio Randazzo.
El ministerio del Interior de la Nación llevó a la Antártida Argentina los nuevos DNI y pasaportes para los que viven en la Base Marambio, quienes se dieron el gusto de su vida al subirse en la butaca derecha del Torino y giraron por la pista de arretizaje, en una jornada de pura emoción y sabiendo que estaban protagonizando un día histórico para todos los argentinos. El Turismo Carretera llegó a la Antártida Argentina en una reafirmación de la soberanía nacional.
“La Antártida es un emblema de nuestra identidad, de aquello desconocido pero que esta en el corazón de cada uno de los argentinos, y llevar un auto de esta categoría con los colores de la bandera argentina nos llena de satisfacción”, señaló Randazzo en referencia al automóvil que por primera vez en la historia llegó al continente blanco.
FUENTE Prensa ACTC
PHOTO © ACTC ► El Torino conto con los impulsores de Gardelito Fernandez
PHOTO © ACTC ► Decorado con la bandera Argentina es el primer auto de competición en la Antártida
PHOTO © ACTC ► Tito acelerando en plena pista de aterrizaje
PHOTO © ACTC ► El personal de la Base Marambio posando con el “Toro”